¡Hola! Bienvenidx.
Mi historia:
Soy Paula, profesora de Yoga, formada en Hatha Yoga por la Escuela Internacional de Yoga (EIY) con una titulación certificada (400h) por la Yoga Alliance, la European Yoga Federation y la Federación Española de Yoga Profesional, y en Yoga para Embarazadas (50h) con Yoga sin Fronteras.
Madrileña de nacimiento, tuve la fortuna de vivir mi infancia y adolescencia en un pueblo del Valle del Tiétar (Ávila) hasta que me mudé a Madrid para estudiar en la universidad, donde resido actualmente.
Me apasiona viajar, vivir y conocer nuevos lugares y descubrir sus culturas. Soy amante y defensora de la naturaleza, y estoy muy comprometida con el desarrollo sostenible social y ambiental. Estudié la licenciatura de Ciencias Ambientales y me especialicé en Cooperación Internacional para el Desarrollo. Profesionalmente, desde que acabé mis estudios me he dedicado a la gestión socio-ambiental de proyectos, a la sostenibilidad, innovación social y ética, faceta que actualmente compagino con mis otras dos pasiones: la danza y el Yoga.
Me gusta definirme como una persona apasionada por el movimiento y la expresión corporal. Desde siempre he sido una persona muy activa, aficionada al teatro, al cine, a los deportes y a la danza. De personalidad atrevida, alegre y bastante perfeccionista… la vida me dio un fuerte golpe al perder a mi padre (mi principal referente) cuando yo solo tenía 22 años a causa de la ELA. Este hecho me hizo reflexionar a un nivel muy profundo durante los años y cambiar mi forma de ver y ser en el mundo, haciéndome algo más consciente de la importancia de vivir la vida cada día como un regalo y de actuar siempre desde el amor.
Antes de que llegara el Yoga a mi vida, llegó la danza. Soy bailarina y profesora de danza oriental – tribal fusión y FCBDⓇStyle. Además, practico otros estilos como el contemporáneo, urbano y danza aérea. Fue en mis clases de danza durante la época de la universidad cuando por primera vez conocí el Yoga. Mis profesoras realizaban el saludo al Sol y otros asanas como calentamiento y estiramiento en las clases. Pero, no fue hasta unos años después, en 2016, que comencé a practicar Yoga apropiadamente.
El Yoga me fascinó. Desde ese momento, ¡me enganchó!. Esta práctica llegó en un momento de mi vida en el que llevaba ya algunos años lidiando con una alta carga profesional ligada a estrés y recuerdo salir de mis primeras clases “flotando”y genuinamente en calma y feliz.
A partir de esas primeras clases me comprometí a integrar la práctica del Yoga en mi día a día, hasta que en un determinado momento y con el afán de seguir profundizando en mi práctica personal y en el conocimiento del Yoga de una forma más integral, decidí formarme como profesora.El Yoga y su filosofía forman una parte esencial de mi vida.
Mi práctica personal se nutre de muchos estilos, pero son el Hatha, Vinyasa y Jivamukti Yoga los estilos que practico principalmente. Junto a mi pareja, soy autodidacta del acroyoga, estilo que disfruto muchísimo.
Emocionada por la posibilidad de transmitir a otras personas la magia de esta práctica entre los años 2018/2020 completé mi formación como profesora en la EIY en Madrid y desde entonces he seguido formándome para pulir mi manera de enseñar.
Formaciones:
• 400h de Hatha Yoga en la Escuela Internacional de Yoga en Madrid, España (modalidad presencial)
• 50h de Yoga para Embarazadas en Yoga Sin Fronteras (modalidad online)
Mi misión
Compartir el Yoga y sus beneficios
Considerando el contexto actual que vivimos, mi misión es compartir esta práctica para mejorar la calidad de vida y el bienestar de las personas. Así como transmitir mis conocimientos y experiencia personal, sus valores, principios y filosofía. Siempre desde la base de que el Yoga es una disciplina para todas las personas, por lo que apelo a la universalidad de su acceso. Mi objetivo es acercar su práctica de la manera más abierta, respetuosa e inclusiva posible, abrazando y celebrando la diversidad.
Para ello, estoy comprometida con mi aprendizaje y evolución continua, tanto en mi práctica personal como profesora, experimentando y disfrutando del camino.
Muchas han sido las personas que me han acompañado, apoyado, influido, enseñado y animado en este camino hasta el día de hoy. Desde aquí a todas ellas les mando un gran abrazo: maestras/os, compañeras/os, familia, mi pareja, amigas/os y por supuesto, a todas las personas que han sido y serán alumnas/os y practican a mi lado: sois luz en mi camino.
Namaste.